Una espera que
dura ya 27 años, el día a día de un pueblo que con fe sigue mirando hacia la Comunidad
Internacional en busca de su futuro y su salvación. Desde 1975, año en el que España
abandono su poder, como país colonizador, sobre el Sahara Occidental, vive el pueblo
saharaui bajo la ocupación y la opresión militar m arroquí, dispersos en su tierra originaria.
El pueblo saharaui no era la primera vez
que se enfrentaba a un poder dominador, y el Frente Polisario (Frente por la Liberación
de Saguia el Hamra) creado para la liberación ante la soberanía española, sin
pensárselo se enfrento al invasor. No fue hasta 1991 el alto al fuego; creándose para
ello el llamado Plan de Paz de las
Naciones Unidas, adoptado por el Consejo de Seguridad y formando también una Comisión de
Naciones Unidas para el Referéndum del Sahara Occidental (MINURSO).
Este Plan de Paz, preveía la celebración de un referéndum de
autodeterminación para atribuir a Marruecos o al independentista Frente Polisario la
soberanía del Sahara Occidental, que España abandonó.
Miles de refugiados salieron hace casi tres décadas de su hogar, para vivir en
campamentos de refugiados en los países vecinos como Mauritania, Mali y sobretodo
Argelia. En este último los campos de refugiados de Tinduf acogen a aproximadamente
200.000 personas. Y aún nada ha cambiado.
El primer aplazamiento del MINURSO, se produce en el año 1992, por exigencias del
Gobierno de Marruecos. Estas consistían en la incorporación de 170.000 candidatos a
votantes por parte de Marruecos; será en 1997 cuando bajo la supervisión de la ONU y
James Baker como enviado especial del Secretario General de la ONU, se reactive y complete
el Plan de Paz.
Pero los aplazamientos no se terminaron ahí, y con ellos vinieron las sucesivas
renovaciones y búsquedas de soluciones al conflicto. El Secretario General de la ONU,
Kofi Annan, reconoció el fracaso en el territorio y dio nuevas salidas. La celebración
de un referéndum de autodeterminación, acordado en el Plan de Paz de 1991; un estatuto
de autonomía del Sáhara Occidental, para su integración en Marruecos; o la partición
del territorio entre los dos contendientes.
El Frente Polisario rechazaría la opción de la autonomía, evitando una anexión
definitiva a Marruecos, mientras que estos se oponen al plan de partición del territorio.
Sin embargo fue aceptado por ambas parte el Plan de Paz ya firmado años atrás ante la
mediación de Naciones Unidas.
El mundo tampoco ha permanecido impasible ante esta situación, no se olvidan del
conflicto países como Estados Unidos, cuya posición esta del lado marroquí. Al
confirmarse y proponer ante el llamado grupo de amigos, en abril de este mismo
año, la integración del Sáhara Occidental en Marruecos. Los demás países formantes de
está reunión, mantienen opiniones varias. Gran Bretaña es de la inclinación hacia
Marruecos, al igual que la potencia francesa, no olvidándonos de los tiempos en que
Marruecos fue colonia del Imperio francés. Argelia por su parte pone todo su empeño en
la ayuda al pueblo saharaui y al Frente Polisario.
Rusia se encuentra en la vía de la partición entre los contingentes,; y España
en dos disyuntivas. Por un lado la resolución de la ONU y por el otro asumir el Plan
Baker que opta por una amplia autonomía bajo soberanía marroquí. Frente a una política
marroquí, siempre demasiado tergiversadora, donde su verdad parece La Verdad;
España defiende a rajatabla los acuerdos que contemplan una convocatoria de referéndum
al pueblo saharaui y, sin embargo, tiene anunciado un compromiso de acatar sin reservas la
decisión de Naciones Unidas aceptada por el Frente Polisario.
Ha pasado demasiado tiempo y el sufrimiento y sentir de este pueblo, al parecer
olvidado, es cada día mayor. Piden un referéndum justo y limpio donde obtenga esa
merecida recompensa a tantos años de espera y de confianza en la justicia internacional.
Pero las prorrogas nunca han cesado. La última de todas ellas se confirmo el pasado 31 de
julio de este año. Las diferencias entre ambas partes en la composición del censo que
elabora el MINURSO, sigue originando aplazamientos a este referéndum. La Comisión de
Identificación del MINURSO ha aprobado, hasta el momento, la inscripción de 86.381
personas, pero Marruecos ha presentado más de 135.000 recursos y la condición de que
solo consentirá el referéndum si se aceptan estas apelaciones.
La nueva fecha ha sido concretada para el 31 de enero del 2003, Kofi Annan sigue
buscando y pidiendo soluciones; y Marruecos, con su rey, Mohamed VI, mantiene la
voluntad inquebrantable de no renunciar a un solo ápice de su
territorio. 
Mientras el Sahara
Occidental sigue muriendo, en una lucha en la que no se hayan un fin. Cada día los
hombres saharauis inventan la mejor manera de salvaguardar a sus familias; Al mismo tiempo
que sus mujeres intentan sacar hacía delante cada barrio, cada pueblo... que sobrevive,
desde hace 27 años, en tierra ajena. Su tasa de analfabetismo prácticamente ha
desaparecido y cada día buscan mejorar las condiciones de sus campamentos, intentando
prepararse para la reconstrucción de su propio país después de conseguir su tan ansiada
independencia. Sólo un nuevo aplazamiento del referéndum, permitiría alargar el
sufrimiento de todo un pueblo que muere por hallarse en paz y libertad. |